18 de mayo de 2017. Cines Los Prados, Oviedo. V.O.S.
Siguiendo la descripción de Dante, Sandro Boticcelli dibujó un mapa detallado del infierno. Las penalidades de sus nueve círculos, la biografía del pintor, su relación con los Médici, el olvido en que cayó en los siglos posteriores y el lugar que ocupa ahora en el olimpo del arte renacentista son algunos de los temas de los que trata este documental en el que vamos siguiento, de la mano de expertos, el rastro de esta enigmática obra por Berlín, Londres, Escocia, el Vaticano y, por supuesto, Florencia.
Un único día entre semana y en una única sesión. Así se programan estos estupendos documentales sobre arte que, de vez en cuando, se cuelan en la cartelera comercial. El de Ralph Loop sobre Botticelli es formalmente sobrio pero muy atractivo. Por el análisis que presenta sobre el Mapa del infierno, por la descripción de su contexto y por la indagación sobre las motivaciones que pudo tener Botticelli y sobre lo que sucedió con sus dibujos después. Pero además de ser un estudio más que interesante sobre el autor y su obra, la película también nos ofrece algunas reflexiones no menos valiosas sobre el arte. Sobre la forma en que el tiempo va redefiniendo la relación entre el artista y el público. Y sobre la manera en que un espacio, en este caso Florencia, puede ser causa y efecto de una pasión estética.