5 de octubre de 2018. Cines Parqueastur, Corvera.
Jackson se enamora de Ally. De su belleza y de su voz. Él es un cantante famoso y ella escribe canciones que él le anima a cantar en sus conciertos. Podría ser una historia de amor perfecta si no fuera porque ella se convertirá pronto en una estrella fulgurante y él entra en fase declinante.
Ella es Lady Gaga y está estupenda cuando canta y cuando no. Él dirige la película y se empeña en protagonizarla en exceso. En ella todo son matices que cautivan. En él todo son gestos de guaperas que cansan enseguida. Y es una lástima porque, con una historia tan clásica, había mimbres para algo mejor. Por lo demás, las canciones se subtitulan de manera intermitente: unas sí y otras no. Debe ser que se supone que los espectadores a ratos sabemos inglés y a ratos no.