14 de febrero de 2015. Parqueastur, Corvera.
Durante un largo viaje tres jóvenes se detienen en busca de un habilidoso hacker cuya señal han detectado en una casa abandonada. Allí pasa algo extraño y reaparecen en un lugar desconocido en el que les retienen unos tipos que llevan trajes espaciales. Solo uno de ellos parece que podrá regresar a nuestro mundo.
Jóvenes con miradas intensas. Terror como el de El proyecto de la bruja de Blair. Espacios asépticos para una pesadilla con aires kubrickianos. Y un final entre Interstellar y Matrix. Son las piezas de este extraño puzle que no me acaba de encajar. Ni interesar.