de Aki Kaurismäki. Finlandia, 1990. 69’.
7 de abril de 2024. Centro Niemeyer, Avilés. V.O.S.
Una joven que trabaja en una fábrica de cerillas vive con su madre y su padrastro llevando una vida triste en la que solo hay silencios y reproches. Ella intenta encontrar pareja, pero las cosas no le salen bien.
Personajes de intenso hieratismo. Colores vivos en ambientes ásperos que uno podría recordar en blanco y negro. Y una historia de desamparo femenino que se resolverá con matarratas. El cine de Kaurismäki me recuerda siempre a los cuadros de Hopper: con escenas silentes, magnéticas y reconocibles. Quizá haya sido el éxito de Fallen Leaves lo que ha motivado que se proyecten ahora algunas de sus películas en el Niemeyer, y también en Filmin. Buena noticia para los cinéfilos de aquí y de allá.