de Kelsey Mann. EE.UU., 2024. 96’.
23 de junio de 2024. Cines Parqueastur, Corvera.
En 2015 Pete Docter y Ronaldo Del Carmen dirigieron Del revés, aquella joya sobre la mente de una niña que nos dejó alucinados con momentos tan estupendos como el tránsito por la sala de abstracción, la eliminación de los recuerdos no evocados, la mezcla entre hechos y opiniones o la caída al abismo del olvido. En Del revés 2 Kelsey Mann retoma la idea cuando la niña ya tiene trece años y se le agolpan las emociones. Las imágenes siguen siendo estupendas, pero la sorpresa ya es menor. De hecho, la finura psicológica de la película anterior aquí se concentra en las dimensiones emocionales de la identidad, subrayándose el papel de la ansiedad sin dejar sitio para la curiosidad, la verdad, la opinión o para otros valores distintos de la competitividad. De hecho, la realidad exterior que en Del revés se centraba en la poderosa idea del cambio de vida al cambiar de ciudad, aquí toma como referente un partido de hockey, un espacio propicio para esa ansiedad campeonista que parece dominar el imaginario neoliberal. Esta tarde de domingo la sala estaba llena de niños que aún no han llegado a la edad de Riley y que, por tanto, no pudieron ver la película anterior. Una lástima porque para ellos, si la ven, aquella ya no será la primera.