10 de junio de 2017. Laboral Cinemateca, Gijón. V.O.S.
Dominik es hijo único en una familia bien de Polonia. Su padre se dedica a la política y su madre tiene un puesto importante en un estudio de moda. El chico tiene dudas sobre su orientación sexual y cada vez pasa más tiempo encerrado en su habitación. Sobre todo desde que conoció a una chica con la que comparte vivencias virtuales en un grupo extraño: la sala de los suicidas.
Un adolescente desquiciado y desquiciante. Unos padres que no saben cómo tratar a ese hijo intratable. Y unas animaciones curiosas para esa segunda vida virtual que acabará con la del chico. Todo en entornos elegantes y con maneras muy correctas. Lo malo es la que la tesis de fondo viene a relacionar la soledad y el desamparo del muchacho con la pasión profesional (y cultural) de los padres. Vamos, lo de siempre.