4 de diciembre de 2018. Cines Los Prados, Oviedo.
Marcos y Ana acaban de despedir a su hijo que se ha ido a estudiar a España. Ellos se llevan muy bien pero al quedarse solos se replantean su relación y acaban separándose. Cada uno tendrá otras historias, pero ninguna será mejor que los veinticinco años de recuerdos y complicidades que habían compartido.
Una estupenda opera prima con una historia muy grata sobre un matrimonio de la burguesía porteña que se hace querer. La complicidad entre los personajes y la fluidez de sus diálogos es muy notable. De hecho, Juan Vera consigue que su historia recuerde a las de Linklater, pero con la ventaja de situarla en Buenos Aires y de contar con unos actorazos con una química impresionante. Que Ricardo Darín esté soberbio en el papel de maduro delicioso es algo que no sorprenderá a nadie después de ver tantas películas que él ha convertido en magníficas. Pero El amor menos pensado no funcionaría si junto a él no estuviera también Mercedes Morán, una actriz que ya me pareció excelente en películas tan estupendas como La ciénaga, Betibú, Neruda y hace bien poco en El ángel. Así que ha sido una delicia regresar a ese Buenos Aires burgués (casi neoyorquino) con esta historia tan amable como bien contada.