25 de octubre de 2019. Teatro Zorrilla, 64º Semana Internacional de Cine de Valladolid (sección Punto de Encuentro). V.O.S.
Una familia tunecina muy feliz dejará de serlo durante un viaje al sur de su país. En una emboscada inesperada a una patrulla de policías el hijo de la pareja recibe un disparo que daña gravemente su hígado y requiere un trasplante. La madre no puede ser la donante porque tiene otro grupo sanguíneo. El padre tampoco porque los análisis indican que él realmente no lo es. Ella intentará encontrar al padre biológico y él aceptará la oferta que le hacen para buscar otra solución.
El comienzo promete y la trama parece que nos va a ofrecer esos requiebros morales que hacen tan estupendas muchas películas que nos llegan desde el otro lado del Mediterráneo (sin ir más lejos la que vimos el martes en la Casa de la Cultura). Sin embargo, pronto se ve que esta tiene más amaneramientos gestuales y formales que maneras originales o contenidos novedosos. Por lo demás, el machismo reactivo del padre me resulta exasperante. El corto tailandés (El dossier de El dossier) sobre unos chicos que quieren hacer una película fue algo mejor. A ver qué tal mañana.