21 de febrero 2013. Cines Van Dyck, Salamanca.
Alfred Hitchcock quiere hacer Psicosis pero todos temen los resultados de ese proyecto. Con el apoyo de su mujer decide financiarlo hipotecando su propia casa. Como todos sabemos, el resultado da mucho más miedo que el que tenían los de la Paramount.
Detrás de todo gran hombre hay una gran mujer. Eso dice el cartel original de la película. Y al menos en el caso de Hitchcock parece que sí. La película se sigue con interés, aunque seguramente su mayor valor es que animará a muchos a (volver a) ver Psicosis. Pero hay que reconocer que Anthony Hopkins consigue algo tan difícil como hacer ver durante hora y media la imagen de alguien que era ya tan conocido como aquel mago del suspense. En mi caso no fue así. Entre el rostro de Anthony Hopkins y el de Hitchcock debe estar justamente el de un profesor de mi facultad. Y debo decir que no dejé de verlo durante toda la película. Hopkins lo clavó.
Alfred Hitchcock quiere hacer Psicosis pero todos temen los resultados de ese proyecto. Con el apoyo de su mujer decide financiarlo hipotecando su propia casa. Como todos sabemos, el resultado da mucho más miedo que el que tenían los de la Paramount.
Detrás de todo gran hombre hay una gran mujer. Eso dice el cartel original de la película. Y al menos en el caso de Hitchcock parece que sí. La película se sigue con interés, aunque seguramente su mayor valor es que animará a muchos a (volver a) ver Psicosis. Pero hay que reconocer que Anthony Hopkins consigue algo tan difícil como hacer ver durante hora y media la imagen de alguien que era ya tan conocido como aquel mago del suspense. En mi caso no fue así. Entre el rostro de Anthony Hopkins y el de Hitchcock debe estar justamente el de un profesor de mi facultad. Y debo decir que no dejé de verlo durante toda la película. Hopkins lo clavó.