26 de octubre de 2013. Cines Broadway, 58º Semana Internacional de Cine de Valladolid (sección Spanish Cinema 2013). V.O.S.
Gallecs en los días más calurosos del verano. Un tiempo y un lugar donde se cruzan varias vidas. La de Iurie, el moldavo que practica la lucha libre y trabaja en el campo. La de Raül, el payés que sufre la plaga de la mosca blanca en sus cultivos. La de María, la anciana que tiene que dejar su casa para ir a una residencia. La de Rose, la cuidadora filipina que la atiende. La de Maribel, la prostituta que espera al borde del camino.
La plaga es una película sobre los límites. Los que definen los espacios de lo urbano y lo rural. Los que hacen confluir vidas de aquí y de allá. Los que separan realidad y ficción. Los que borra esta magnífica película. Los personajes no pueden ser más reales. De hecho, son las propias personas interpretándose a si mismas. Mientras la plaga asola los cultivos y la canícula traspasa la pantalla, Neus Ballús consigue que interesen estos seres humanos. Los que tienen nombre en su película, pero también los demás: los padres y los hijos de Raül, los compañeros que entrenan con Iurie, la mujer con la que habla por teléfono, el hombre que traslada a Maribel, las compañeras de Rose, los ancianos con los que (no) convive María. "¿Cómo se hace para no pensar?". Lo pregunta ella en la residencia. Y Neus Ballús nos invita a responderle en esta espléndida película sobre la convivencia entre esas personas y sobre la dignidad con que afrontan estos tiempos. Al final uno piensa que hay motivos para la esperanza en esta intrahistoria del presente. Y también para el cine con películas como ésta.
La plaga es una película sobre los límites. Los que definen los espacios de lo urbano y lo rural. Los que hacen confluir vidas de aquí y de allá. Los que separan realidad y ficción. Los que borra esta magnífica película. Los personajes no pueden ser más reales. De hecho, son las propias personas interpretándose a si mismas. Mientras la plaga asola los cultivos y la canícula traspasa la pantalla, Neus Ballús consigue que interesen estos seres humanos. Los que tienen nombre en su película, pero también los demás: los padres y los hijos de Raül, los compañeros que entrenan con Iurie, la mujer con la que habla por teléfono, el hombre que traslada a Maribel, las compañeras de Rose, los ancianos con los que (no) convive María. "¿Cómo se hace para no pensar?". Lo pregunta ella en la residencia. Y Neus Ballús nos invita a responderle en esta espléndida película sobre la convivencia entre esas personas y sobre la dignidad con que afrontan estos tiempos. Al final uno piensa que hay motivos para la esperanza en esta intrahistoria del presente. Y también para el cine con películas como ésta.