sábado, 16 de noviembre de 2019

Meseta

de Juan Palacios. España, 2019. 89’.
16 de noviembre de 2019. Escuela de Comercio, 57º Festival de Cine de Gijón (Sección: Rellumes).

Un ortomapa mesetario sirve de preámbulo. Luego bajamos a tierra y acompañamos a un rebaño de ovejas cruzando por debajo de una autovía. Finalmente las recogeremos con los perros antes de que llegue la tormenta. En medio, la vida cotidiana de las gentes de este paisaje ancho y fascinante de la meseta castellana.

Ni una sola vez se dice, ni en la película ni en el estupendo coloquio posterior, la España vacía (y mucho menos esa estupidez de la España vaciada -pobre Sergio del Molino, él no tiene culpa de lo que ha pasado con el título de su libro-). Y eso ya es un gran mérito de Juan Palacios. El otro es saber contar, no una historia, sino un espacio humano. Meseta es un estupendo documental que merece (que los está recibiendo) muchos premios. Sobre todo porque lo que muestra nunca es impostado. Parte de esa inspiración que el director reconoce que procede de esos veranos zamoranos de su infancia (los de la mía fueron, y siguen siendo, salmantinos). Meseta tiene la dosis justa de seriedad y de humor para que lo uno no se convierta en amargura o denuncia redundante y lo otro no banalice el valor de lo mostrado. Es una película que debería interesar a mucha gente. Entiendan o no lo que es o ha sido vivir en la meseta.