21 de agosto de 2018. Cines Ocimax, Gijón. V.O.S.

El qué dirán. Ese era el título original de esta película. Una expresión que aquí se entendería muy bien pero que alguien decidió sustituir por ese titulo que parece hablar de un viaje importante que, sin embargo, solo ocupa un tercio de la historia. De todas formas, si una película tiene problemas con la verosimilitud, es maniquea y refuerza prejuicios contra los inmigrantes, poner un viaje en su título o aludir a la presión del entorno acaba siendo indiferente. Más en la línea de la tópica y sobrevalorada Mustang de Deniz Gamze Ergüven que de la irónica y mucho más oportuna sobre estos temas La gran enfermedad del amor de Michael Showalter, El viaje de Nisha es una película más que prescindible. Innecesaria.