de Stéphane Brizé. Francia, 2021. 96’.
13 de septiembre de 2022. Filmin. V.O.S.
No hay mejor pareja en el cine francés que la que forman ese gran actor que es Vincent Lindon y ese magnífico director llamado Stéphane Brizé. Un nuevo mundo tiene mucho que ver con La ley del mercado, otra estupenda película de los dos. Aquí se nos muestra otra vez cómo funciona este nuevo mundo pero unos peldaños más arriba, en el lugar de un director industrial que quiere ser decente pero está sometido a presiones insoportables. La trama familiar es magnífica con escenas perfectas como el diálogo inicial con los abogados, las de los encuentros con el hijo o la de la venta de la casa. La parte profesional es prima hermana de las historias de Ken Loach o los Dardenne pero en versión, si cabe, más contenida. Entre las escenas de ese mundo odioso me quedo con la de la reunión telemática entre los directivos franceses y ese jefazo norteamericano que los trata con chulería. Es la única en la que se habla en inglés y me parece que eso es más que un guiño. Por lo demás, la escena final en que oímos la voz de Lemesley leyendo con dignidad su carta de renuncia mientras vemos una marioneta movida con ternura por ese adolescente pasmado es la mejor metáfora de este nuevo mundo en el que las vidas de las gentes dependen de los manejos financieros de unos canallas depredadores y desquiciados que son los que verdaderamente mueven los hilos en este nuevo mundo.