domingo, 31 de octubre de 2021

Colmena

de Blerta Basholli. Kosovo, 2021. 83’.
31 de octubre de 2021. Teatro Carrión, 66º Semana Internacional de Cine de Valladolid (Sección oficial). V.O.S.

Como otras mujeres de su pequeño pueblo en Kosovo, Fahrije sigue esperando a su marido que desapareció en la guerra. O más bien a que encuentren su cadáver en alguna de las fosas comunes que las organizaciones internacionales siguen investigando. Ella vive con sus hijos y su suegro pero la situación económica de la familia es muy complicada. Sus colmenas no dan suficiente, así que anima a otras mujeres a preparar juntas unas conservas de pimientos que llaman ajvar y llevarlas a la ciudad para ponerlas a la venta en el supermercado. Ella se saca el carnet de conducir y consigue convencer a muchas de sus vecinas para que formen juntas una especie de cooperativa. Pero en el pueblo son muy machistas y piensan que al hacer eso están traicionando la memoria de sus maridos.

La película aborda los efectos de las guerras cuando las guerras acaban. Asistimos a los desgarros en la memoria de una familia, a los sentimientos de culpa que sienten quienes no la tienen y al heroísmo callado de unas mujeres que quieren salir adelante y, precisamente por ello, sufren el desprecio de los que han sobrevivido a la guerra. Blerta Basholli lo cuenta sin ningún subrayado, siguiendo siempre a esta madre coraje silenciosa, seria y esforzada que en medio del dolor se empeña en ayudar a otras mujeres para que juntas puedan sobrevivir a la barbarie. Con una presencia casi continua, la actriz Ylka Gashi ha hecho un trabajo excelente encarnando a un personaje al que el dolor limita las posibilidades expresivas a la máxima contención y a las mínimas palabras. El premio que le han dado a la mejor interpretación femenina es el motivo por el que la película se ha proyectado de nuevo hoy domingo. Sin embargo, y sin poner ningún pero al mérito de su trabajo, creo que el jurado, además de a la actriz, ha querido premiar también al personaje, quizá porque se trata de una historia basada en hechos reales. Terminamos con Colmena nuestra estancia (esta vez un poco más larga) en esta edición de la Seminci que, como siempre, nos ha hecho disfrutar de buen cine en los teatros y las salas de esta ciudad tan agradable. Volveremos.