sábado, 31 de octubre de 2015

Mustang

de Deniz Gamze Ergüven. Francia-Turquía, 2015. 97’.
31 de octubre de 2015. Teatro Carrión, 60º Semana Internacional de Cine de Valladolid (sección oficial). V.O.S.

Cinco adolescentes huérfanas viven con su abuela y su tío en un pueblo turco. Su fresca alegría resulta molesta en un entorno tradicional que las irá preparando para matrimonios concertados. Pero algunas de ellas se rebelan.

Entramos en la sala sabiendo que el jurado ha premiado esta película con la Espiga de Plata (también ha recibido el premio de la crítica, el del público, el de los jóvenes y hasta el premio Sociograph que conceden unos sensores que se supone que detectan las emociones del público). Parece, por tanto, que hemos tenido suerte en la selección de las películas. Pero no. Tengo que discrepar sobre los méritos de Mustang, una historia que bien podría ser una más de las que se proyectan en la sección Enfants Terribles del festival de Gijón, agradan a algunos escolares y luego se olvidan. Y es que la guapura urbana de esas chicas tan majas y bien vestidas parece inverosímil en un entorno rural que de repente se convierte en poco menos que integrista. Mustang es cine tópico para criticar algo tan obvio como que concertar matrimonios está muy mal (en Turquía y en cualquier sitio). Por suerte, el corto que la precedió (Nothing stranger de Pedro Collantes) tenía algo de poesía e incluía unas imágenes muy hermosas de unos pescadores chinos que utilizan cormoranes para sacar peces del río.