martes, 16 de julio de 2024

Soñadores

de Bernardo Bertolucci. Reino Unido, 2003. 120’.
16 de julio de 2024. Cines Embajadores-Foncalada, Oviedo. V.O.S.

Matthew es un joven estadounidense que comparte pasiones cinéfilas con Isabelle y Theo, dos hermanos que, aprovechando que sus padres están de viaje, le invitan a su casa. Allí los tres compartirán juegos, cama y bañera mientras fuera otros jóvenes buscan la playa bajo los adoquines. Es en París. Mayo del sesenta y ocho.

Me ha encantado volver a verla veinte años después. Soñadores es la primera película del ciclo que este verano Embajadores-Foncalada dedica a la ciudad de París. El ambiente no ha podido ser mejor. Edades diversas entre el público, cinefilia radical en los más jóvenes (en eso la pantalla era hoy bastante especular) y ganas de hablar del cine de Bertolucci mientras tomábamos el vino que nos ofrecieron a la salida. Además de confirmarme que mi gusto por su cine no se ha erosionado con el tiempo, hoy he encontrado en Soñadores vínculos curiosos con otras películas estupendas sobre intimidades amorosas en situaciones con espacio perimetrado y tiempo limitado. Por ejemplo, En la cama, del chileno Matías Bize o Una habitación en Roma, de Julio Medem. Con Soñadores formarían un magnífico tríptico, siendo seguramente la de Bertolucci la más atrevida. Ojalá que su cine vuelva a nuestras pantallas. Supongo que para muchos jóvenes sería una sorpresa tan grata como lo ha sido encontrarse ahora con los tres colores de Kieślowski.