sábado, 10 de diciembre de 2022

Pequeña flor

de Santiago Mitre. Francia, 2022. 98.
10 de diciembre de 2022. Cines Groucho, Santander. V.O.S.

José es un dibujante argentino que acaba de tener una niña con su mujer francesa. A él le despiden de su empresa y ella encuentra un trabajo que le ocupa todo el día. Así que José se ocupa de la niña y una vez a la semana se ve con un vecino con el que escucha siempre una pieza de jazz llamada Petite Fleur. Y es justo entonces cuando lo mata. Lo hace cada jueves de maneras muy distintas. Y a continuación su mujer suele llegar muy contenta del trabajo. Luego ella empezará a ir a un grupo de terapia y los dos se separan. Por un tiempo.

Esta mañana hemos visto en el Centro Botín la magnífica exposición de Damián Ortega y tras una comida estupenda, volvemos a los queridos cines Groucho (ya quisiéramos en Asturias tener alguna sala de exhibición comercial tan buena como esta). Esta vez nos encontramos con la última película de Santiago Mitre. El director de El estudiante, Paulina, La cordillera y Argentina, 1985 se ha ido a Francia para filmar una película pequeña y muy curiosa que es una comedia, un ensayo surrealista, un modelo para armar y muchas cosas más. Y es que cualquier cosa se podría esperar si se le da un papel a Sergi López y se tiene como coguionista a Mariano Llinás (quien, según dicen, ha dirigido otra flor grande y memorable). A él le tuvimos hace poco en el festival de Gijón estrenando otra rareza titulada Clorindo Testa. Pequeña flor es otra película inclasificable y deliciosa. Como Mantícora, la estupenda película de Carlos Vermut que vimos ayer. Las dos están protagonizadas por dibujantes (el de Mitre es analógico) de vida aparentemente tranquila y ensimismada. A veces los azares programan por su cuenta y nos ofrecen coincidencias estupendas.