sábado, 1 de febrero de 2025

Un tranvía llamado deseo

de Elia Kazan. EE.UU, 1951. 122’.
1 de febrero de 2025. Filmin. V.O.S.

Blanche DuBois llega a casa de su hermana Stella que está casada con Stanley Kowalski. Blanche viene con algunas ínfulas y muchos nervios que acabarán sacando a la luz lo peor de Stanley. Ella ha perdido la casa familiar y, aunque quiere ocultarlo, tiene un pasado tormentoso que Stanley se empeña en descubrir para hacerle el mayor daño.

Ayer vimos en el Palacio Valdés el magnífico estreno de Un tranvía llamado deseo, dirigido por David Serrano, con Nathalie Poza, Pablo Derquí y María Vázquez en los papeles protagonistas. La historia ya cumple tres cuartos de siglo, pero mantiene el mayor interés tanto en esta versión escénica de anoche (muy fiel al texto de Tennessee Williams) como en la película de Elia Kazan que no había vuelto a ver desde hace mucho tiempo. El atractivo de ese macho salvaje que es Stanley y la piedad que despierta el personaje de Blanche son, quizá, los dos polos de la película. Y tanto esta como la obra de ayer conservan intacto el interés de lo planteado por Tennessee Williams y dejan abiertas las valoraciones del público sobre ambos personajes. Quizá sea eso lo que convierte a esta historia en un clásico.