de Olivier Assayas. Francia, 2024. 108’.
9 de marzo de 2025. Centro Niemeyer, Avilés. V.O.S.
domingo, 9 de marzo de 2025
Tiempo compartido
sábado, 8 de marzo de 2025
Mickey 17
de Bong Joon-ho. EE.UU., 2025. 137’.
8 de marzo de 2025. Cines Los Prados, Oviedo. V.O.S.
viernes, 7 de marzo de 2025
Una historia verdadera
de David Lynch. EE.UU., 1999. 111’.
7 de marzo de 2025. Teatro Campoamor, XI Semana del Audiovisual Contemporáneo de Oviedo. V.O.S.
lunes, 3 de marzo de 2025
Mi única familia
de Mike Leigh. Reino Unido, 2024. 97’.
3 de marzo de 2025. Renoir Plaza de España, Madrid. V.O.S.
El director de películas tan magníficas como Secretos y mentiras, Todo o nada o Mr. Turner consigue que sintamos compasión ante la ira más extrema. La que sufre continuamente esta mujer que vive en una casa impoluta pero es incapaz de hablar con su marido o de tocar unas flores que le ha regalado su hijo. La compasión no es fácil con quien agrede y provoca rechazo. Por eso es tan meritoria y acertada la perspectiva que nos hace asumir este veterano director que todo lo que hace lo hace tan bien.
Tierra Baja
de Miguel Santesmases. España, 2024. 96’.
3 de marzo de 2025. Pequeño Cine Estudio, Madrid.
martes, 25 de febrero de 2025
A Different Man
de Aaron Schimberg. EE.UU., 2024. 112’.
25 de febrero de 2025. Casa de la Cultura, Avilés. V.O.S.
lunes, 24 de febrero de 2025
Lee
de Ellen Kuras. Reino Unido, 2023. 116’.
24 de febrero de 2025. Cines Embajadores-Foncalada, Oviedo. V.O.S.
domingo, 23 de febrero de 2025
Christmas Eve in Miller´s Point
de Tyler Taormina. EE.UU., 2024. 106’.
23 de febrero de 2025. Centro Niemeyer, Avilés. V.O.S.
sábado, 22 de febrero de 2025
Aún estoy aquí
de Walter Salles. Brasil, 2024. 137’.
22 de febrero de 2025. Cines Los Prados, Oviedo. V.O.S.
domingo, 16 de febrero de 2025
Vermiglio
de Maura Delpero. Francia, 2024. 119’.
16 de febrero de 2025. Cines Embajadores-Foncalada, Oviedo. V.O.S.
lunes, 10 de febrero de 2025
Cleo de 5 a 7
de Agnès Varda. Francia, 1962. 90’.
10 de febrero de 2025. Cines Embajadores-Foncalada, Oviedo. V.O.S.
domingo, 9 de febrero de 2025
La mitad de Ana
de Marta Nieto. España, 2024. 89’.
9 de febrero de 2025. Centro Niemeyer, Avilés.
La mitad de Marta dirige y la otra mitad interpreta. Y las dos lo hacen magníficamente. La historia de Son tiene bastante que ver con la de Lucía en 20.000 especies de abejas. Pero aquí la transición que más importa quizá no sea la infantil sino la de esa madre a la que tanto le cuesta aquello que no le cuesta nada al padre. Marta Nieto consigue que entendamos muy bien los sentimientos de esa mujer que sufre al comprobar que quien siempre tiene la posición ganada es él. La mitad de Ana es hiperrealista en las palabras y en los gestos, pero también poética en esos cristales que reflejan o deforman las imágenes y mágica en ese cuadro animado tan propicio para la imaginación. Así que Marta Nieto nos ofrece recompensas dobles con esta película. Un esmerado retrato infantil y la reivindicación poética de una maternidad no culpable.
viernes, 7 de febrero de 2025
María
de Pablo Larraín. Italia, 2024. 123’.
7 de febrero de 2025. Cines Los Prados, Oviedo. V.O.S.
jueves, 6 de febrero de 2025
Memorias de un caracol
de Adam Elliot. Australia, 2024. 94’.
6 de febrero de 2025. Cines Embajadores-Foncalada, Oviedo. V.O.S.
"Esta película ha sido hecha por seres humanos". La frase aparece al final de los créditos y no solo acredita (y reivindica) la renuncia a que la creación humana tenga auxilio (o sustitución) artificial, sino que es toda una declaración de principios éticos y estéticos. Tras aquella joya titulada Mary and Max, Adam Elliot nos regala otra delicia que fascina y conmueve por igual. Desde los créditos iniciales hasta esa última frase, la pantalla nos imanta con su cromatismo cálidamente triste, su gestualidad conmovedora y con el desarrollo de una historia que, como decía a propósito de su anterior película, resulta edificante (no empalagosa) por lo que tiene de reivindicación de la diferencia y de aceptación de lo dado. Memorias de un caracol es una película de animación para adultos. Es decir, una obra estéticamente sutil y llena de sugerencias, pero carente de truculencia. A no ser que se considere truculenta la soledad, la melancolía o la esperanza.
miércoles, 5 de febrero de 2025
La acompañante
de Drew Hancock. EE.UU., 2025. 97’.
5 de febrero de 2025. Cines Parqueastur, Corvera.
Esta mañana estaba en clase con el cogito, la res cogitans y el genio maligno, así que no ha podido encajar mejor esta película en la que el dualismo, más que cartesiano, es tecnológico. La acompañante es un thriller bien trabado en el que es fácil encontrar parentescos con películas tan sugerentes como Eva, de Kike Maillo, Her, de Spike Jonze, o Ex-Machina, de Alex Garland. Los elementos distópicos son tenues y nada efectistas, pero en la historia es fácil encontrar subtextos sobre el sexismo, el egoísmo amoroso, los dilemas del control y los riesgos de la verdad. Seguramente es recomendable ver la película sin saber nada de ella, pero se la recomiendo también a quien haya leído esta reseña. Y ya no digo más.
lunes, 3 de febrero de 2025
Septiembre 5
de Tim Fehlbaum. Alemania, 2024. 95’.
3 de febrero de 2025. Cines Los Prados, Oviedo.
La mayor parte del metraje transcurre en la sala de edición de la ABC en la villa olímpica. Y eso es lo mejor de la película. La recreación de las tecnologías televisivas predigitales, la interacción entre aquellos profesionales y las decisiones en tiempo real en que se juega bastante más que una cuota de pantalla quedan muy bien retratadas en esta historia en la que no decae el interés ni un segundo. Sin embargo, en estos tiempos de neotrumpismo rampante y de israelismo insoportable resulta un tanto disonante la evocación de aquella tragedia contada, como siempre, desde el ombligo mediático del mundo.
domingo, 2 de febrero de 2025
Mikaela
de Daniel Calparsoro. España, 2025. 90’.
2 de febrero de 2025. Cines Parqueastur, Corvera.
La música navideña en inglés, los copos de nieve y hasta la cámara caen lentamente sobre Madrid al comienzo de la película. Y al final el madero veterano y la joven picoleta conversan de perfil (como los polis gringos) sobre lo bien que lo han hecho antes de que la cámara se eleve y deje a Resines frente al Retiro. En medio, coches varados en la nieve, ladrones rusos en fuga y también un guapo policía y una chica muy maja del centro de emergencias invernales que se tiran los tejos en la noche de Reyes. En un domingo de lluvia apetecía entretenerse con una nevada Calparsoriana que tuviera la tensión de películas suyas recientes como Todos los nombres de Dios. Pero nada que ver.
sábado, 1 de febrero de 2025
Un tranvía llamado deseo
de Elia Kazan. EE.UU, 1951. 122’.
1 de febrero de 2025. Filmin. V.O.S.
Ayer vimos en el Palacio Valdés el magnífico estreno de Un tranvía llamado deseo, dirigido por David Serrano, con Nathalie Poza, Pablo Derquí y María Vázquez en los papeles protagonistas. La historia ya cumple tres cuartos de siglo, pero mantiene el mayor interés tanto en esta versión escénica de anoche (muy fiel al texto de Tennessee Williams) como en la película de Elia Kazan que no había vuelto a ver desde hace mucho tiempo. El atractivo de ese macho salvaje que es Stanley y la piedad que despierta el personaje de Blanche son, quizá, los dos polos de la película. Y tanto esta como la obra de ayer conservan intacto el interés de lo planteado por Tennessee Williams y dejan abiertas las valoraciones del público sobre ambos personajes. Quizá sea eso lo que convierte a esta historia en un clásico.
miércoles, 29 de enero de 2025
Toxic
de Saulė Bliuvaitė. Lituania, 2024. 99’.
29 de enero de 2025. Centro Polivalente Integrado de Lugones. V.O.S.
Ayer vimos en la Casa de Cultura Las chicas de la estación que mostraba la crudeza de las vidas de unas adolescentes en Mallorca. Hoy volvemos al mismo tema con esta historia Lituana que el MUSOC proyecta hoy en Lugones. Toxic retrata los riesgos que puede suponer la esperanza para unas adolescentes sin horizontes. Algo parecido a Las chicas de la estación, una historia, más mediterránea y luminosa, en la que era la ilusión lo que hacía aún más vulnerables a las protagonistas. La historia de Juana Macías quizá resulte más cautivadora y despierte más compasión que la de Saulè Bliuvaitè. En todo caso, la afinidad entre las dos películas es más temática que formal porque creo que Toxic interesará más a los devotos del cine independiente que al público socialmente comprometido. Así que el Leopardo de Oro en Locarno seguramente estaba premiando la atinada combinación entre la sordidez de lo mostrado y el cuidado en lo formal. Cada escena demuestra una notable atención a la composición de los planos y a la contención de los tiempos en esos lugares desolados (los vestuarios, las casas, los exteriores...) que resultan por igual repulsivos y magnéticos (como esa lombriz intestinal metafóricamente retratada en el plano cenital de la cola que forman las aspirantes a modelos). Asimismo, la exuberancia vegetal y los sonidos de las aves contrasta con esos no lugares postindustriales por los que deambulan las chicas. Hasta el punto de que esa confrontación entre lo (in)humano y lo natural me ha recordado algunas escenas (y sonidos) de La zona de interés, la magnífica película de Jonathan Glazer. Por ejemplo, la tarde del baño preambular, la escena de la pesca en el río o los sonidos que llegaban hasta el jardín de la casa. Toxic demuestra conocimiento de los dramas que acechan a la adolescencia femenina y fidelidad estética a la senda formal iniciada por los hermanos Dardenne en películas como Rosetta. Sin embargo, no sé si realmente consigue lo que pretende. O si pretende lo que consigue. Me refiero a ese difícil equilibrio entre las intenciones éticas y las propuestas estéticas.